Reino: animal
Filo: cordado
Clase: mamífero
Los sarrios, o más conocidos como las cabras pirenaicas, son animales bóvidos, es decir, mamífero que tanto como macho y hembra poseen cuernos. Según la forma de los cuernos pueden ser rectos, en espiral o curvos. En este caso, como podemos ver en la imagen de abajo, son curvos. Los usan en defensa ante los depredadores. Los cuernos nacen del cráneo, que es donde se encuentra el núcleo del cuerno. También tienen una vaina protectora alrededor que está formada por queratina, al igual que las pezuñas.
Si a lo largo de su vida se rompen un trozo del cuerno, este no vuelve a crecer.
Otra característica de estos animales es su habilidad de escalar paredes extremadamente verticales. Su capacidad de mantener el equilibro en un precipicio rocoso les ayuda a mantenerse alejados de sus depredadores.
Las pezuñas son clave para que esto pueda ocurrir. Abren los dedos para agarrarse bien a la roca i gracias a una suela blanda gomosa que tienen en la planta de las pezuñas, les ayuda a pegarse en la pared. Esta tracción es más mayor que la de los neumáticos sobre el hormigón.
Distribución
Estos animales solo se encuentran en el Pirineo aragonés, en las montañas pirenaicas. Habitan en montañas de entre 1500 y 3000 metros de altura, por lo que están totalmente adaptados a la vida montañesa. Sin embargo, en épocas invernales se ven obligados a bajar la cota de altura, por la nieve y temperaturas.
Suelen pasear por rocas y riscos, pero siempre habrá cerca algún prado o bosque para poder refugiarse.
Siempre que los veas permanecerán en manada, son animales muy sociables, por lo que los machos y las hembras no tienen ningún problema en convivir juntos. Además, un dato muy curioso es que montan como una guardería para los más pequeños. Las hembras rodean a las crías para crearles una especie de refugio y protegerlas de los depredadores.
Alimentación
Son totalmente herbívoros. En verano tienden a buscar pastos y bosques que proporcionen la mayor cantidad de plantas y hierba, por lo que siempre rondan por prados y árboles. Sin embargo en invierno lo tiene más difícil por la nieve y la congelación, por lo que se alimentan de algunas ramas de árboles y arbustos. Como esto no le da suficientes nutrientes para mantenerse todo el día en movimiento, tienden a reposar y utilizar las reservas que han comido en verano.
No solo comen hierba, también se pueden alimentar de algunos frutos de arbustos o de árboles.
Reproducción
Los sarrios empiezan a ponerse en celo y a aparearse en noviembre. Básicamente los machos desprenden olores a través de unas glándulas que se encuentran detrás de sus cuernos para marcar territorio.
Como el periodo de gestación dura 5 meses, las crías nacen sobre mayo y junio. Solo nace una cría por parto y esta siempre lo tiene muy difícil para sobrevivir. El 40% de las crías que nacen no logran sobrevivir, cosa por la cual la población de sarrios es tan baja.
Comentarios
Publicar un comentario